Caminantes
Ruta:
Talamanca de Jarama – Torrelaguna. 08.12.2013.
Camino
de Santiago Complutense
Distancia:
12 kms
Dificultad
Baja
Comenzó la mañana en nuestro punto de encuentro, el
Parque O’Donnell y enseguida estábamos en ruta hacia Talamanca de Jarama. Una
mañana fría y despejada, los termómetros de los coches llegaron a marcar -5º
C. Llegamos a Talamanca, café, hoy acompañado por galletas y flores de hojaldre
que trae el compañero Luis y que estaban muy ricas.
Nos hacemos la foto de grupo en los restos de una puerta de la antigua muralla y enseguida nos disponemos a una breve visita a esta localidad, que asombra por su extensa historia y patrimonio. El término de Talamanca se extiende por la comarca del Valle del Henares y cuenta con yacimientos prehistóricos de la Edad del Hierro, también restos romanos tan importantes como el Puente Romano que curiosamente ya no salva el río Jarama que ha cambiado el cauce y actualmente pasa por debajo de él un caz de escaso caudal. También los visigodos dejaron restos, una necrópolis y los cimientos del ábside y la nave de un templo.
Plaza fuerte en época de la invasión musulmana que defendía Toledo de las incursiones cristianas del norte; con Madrid que defendía el curso del Manzanares y Alcalá el del Henares, todas en la marca media. Fue reconquistada por Alfonso VI hacia 1079.
Dentro de su historia destaca, ya en el siglo XV, concretamente en abril de 1473, el hijo del Rey de Aragón, Fernando, e Isabel, Princesa de Asturias, residían en la fortaleza de Talamanca de Jarama. En esta localidad y en Torrelaguna tendrían posada hasta 1475, año en que Isabel ya había sido proclamada Reina (diciembre de 1474).
Entre la numerosa corte que les rodeaba se encontraba el poeta más considerado por Isabel de Castilla: el palentino Gómez Manrique, tío de Jorge Manrique.
Ábside de los Milagros. Conocido popularmente como El Morabito. Se trata de la cabecera de una antigua iglesia románico-mudéjar, una construcción característica de ladrillo edificada en el siglo XIII.
Iglesia de San Juan Bautista. Alberga la parroquia del pueblo y conserva intacto un ábside románico de los siglos XII-XIII, de estilo característicamente segoviano.
La Cartuja, data del siglo
XVII. Con este nombre se conoce un complejo agrario, fundado por los monjes de
la Cartuja de El Paular (Rascafría). El edificio, realizado a dos alturas, se
estructura alrededor de un patio en forma de “L”.
Solo añadir un dato curioso,
en esta población se han rodado mas de 130 películas y series, Alatriste, Conan el Bárbaro, 1492, Los
fantasmas de Goya, La Lozana andaluza, Extramuros, El Bosque Animado o Aguila
Roja son algunos ejemplos.
Talamanca es mucho mas,
pero… hay que hacer camino.
Coincidiendo con el Xacobeo
de 2010 el Ayuntamiento de Alcalá de Henares publicó una guía en la que se
describe el Camino de Santiago Complutense, en la que colaboraron miembros de nuestro grupo.
Parte de la primera señal del camino, en la Magistral de los Santos Niños de
Alcalá hasta llegar a La Granja, desde donde el Camino Complutense se une al Camino
de Madrid para llegar a Sahagún, ya en el Camino Francés. Se dan dos
alternativas en el tramo inicial: Una que recorre en su mayor parte una calzada
romana y otra que sigue los pasos del Arcipreste de Hita. Ambas pasan por
Talamanca, desde Valdetorres y camino de Torrelaguna; el que seguiremos.
Salimos de Talamanca por el
camino del cementerio que es una vía pecuaria que camina junto al Río Jarama
bastante tramo. Pronto el camino comienza una ligera subida y en el centro de la
vía se aprecian surcos de bajada de agua.
Caminamos entre campos de cereales ahora en su descanso invernal. El sol
se deja sentir, pero el aire es frío. Se
atraviesa en el camino la nacional 320, cruzamos el río por el puente y desde
allí apreciamos una zona de barbacoas con mesas y bancos de piedra. Lugar muy
agradable. A la derecha seguimos por el Camino de Madrid que al poco comienza
una prolongada subida.
Cerca de la cima, y ya viendo por un lado Torrelaguna como
premio, y la invasora urbanización
Caraquiz por el otro sobre los campos que según cuenta la tradición araba San
Isidro.
Este momento lo aprovechamos
para tomar un respiro.
Comienza la bajada y vemos Torrelaguna de la que sobresale la imponente torre de la colegiata,
por detrás a lo lejos se reconoce el Pico de la Miel en la Sierra de la
Cabrera.
Desde el camino también se
aprecian dos construcciones del canal de Isabel II.
Llegados a la Real Villa de Torrelaguna, nos dirigimos
hacia su iglesia, de buen porte, que nos recuerda a nuestra magistral –
catedral.
La Iglesia Parroquial de la
Magdalena, gótica del siglo XV es uno de los mejores ejemplos en la comunidad
de Madrid. Fue declarada Monumento Histórico Artístico el 27 de abril de 1983.
Se construyó sobre otra iglesia anterior. Tiene una planta y alzado de tres
naves, del tipo basilical. Los retablos son barrocos y platerescos. Entre ellos
destaca el retablo mayor, de 1.752, tipo churrigueresco, atribuido a Narciso
Tomé.
Comenzó a edificarse bajo su
forma actual en el siglo XV, continuando las obras durante toda la centuria
siguiente, rematada ésta por el cardenal Cisneros, natural de esta villa.
Las bóvedas son de crucería
gótica que son sostenidas por una serie de arbotantes apoyados en contrafuertes
entre los que se abren las diferentes capillas en cuyo interior hay retablos de
buena factura.
La torre campanario es del
siglo XV y se debe al maestro Juan Campero que fue contratado por el Cardenal
Cisneros. Tiene tres cuerpos y un chapitel. En el tercer cuerpo se hallan los
escudos de la villa y de Cisneros.
La portada de la
resurrección, del siglo XVI mezcla el gótico mudéjar con el Renacimiento. Los
autores del conjunto fueron Juan de Cisniega y Juan Calderón y fue financiado
por el Arzobispo Fonseca que dejó en ella su escudo de armas. El templo es sede
Arciprestal.
Entre los personajes famosos
nacidos en Torrelaguna, destacan el Cardenal Cisneros, Santa María de la Cabeza y de adopción el poeta Juan de Mena.
En este municipio se pueden visitar muchos sitios interesantes, pero no hay más tiempo, cerramos el día con la caña habitual y regresamos.